"Nos dimos un gran verso, y nos metimos en un grave poema"

sábado, 28 de mayo de 2016

Déjame contarte una historia


Caminos prohibidos

[Ella]
Su mirada fija en la ventana.
Inocente se veía de lejos.
Concentrada en las lágrimas del cielo,
observando bailar las hojas con el viento.


[Él]
Sus ojos fijos en ella,
disimula y pasa su mano por el pelo.
Una vez más la contempla curioso.
Ella despierta del encanto de la lluvia.


[Ella]
Las hojas han caido.
Abre el libro y se funde en él:
Una tragédia cuenta en cada página,
una dama y un rey mueren en desgracia.


[Él]
Suspira en silencio, se pregunta que le pasa.
Dos noches antes y ella en sus memorias.
Despertó confudido.
La realidad ha sido engañada.


[Ella]
Una historia ha llegado a su fin, cierra el libro.
Ansias de dormir siente ella.
A su alrededor un silencio calmante.
Observa y esos ojos encuentra.
Se sonroja.


[Él]
Se encuentran y se separan al instante.
Idiota se dice.
La observa por última vez.
Mejillas sonrojadas y cabeza gacha.


[Ella]
Finge no haber pasado nada.
Se esconde tras su propio muro.
No sabe que le pasa.
Un cuento de hadas; una noche antes a soñado. Él y ella. Enamorados.
Quiere contárselo a alguien, mas sabe que criticas le esperan.
Ella junto a él no compaginan.
Lo sabe bien.
Tinta roja ha manchado su labio, con fuerza calla su secreto.


;


Dos caminos opuestos cuenta,
dos amores no correspondidos.
Típico cliché amoroso.
Pero la realidad puede ser otra,
terminan juntos o destrozados.


Ella prefiere cerrar su corazón.
Sabe que no sirve querer amar.
Roto tendrá el alma, si sigue temiendo al amor.
Mas decide los pedazos y el quemar.
Día tras día, mañana tras mañana, hora tras hora él la observa.
Dudar le es corto. No sabe que tiene ella.
Fría y distante ahora.
Él lo acepta y cambia su manera.
Frío y distante él será, pero observar y amarla no parará.


Dos caminos infinitos.
Dos mil pedazos rotos.
Dos almas perdidas
y un puente prohibido.
                                  
                                  
 —Musa E

viernes, 27 de mayo de 2016

Un anónimo estro

*Estro: 1. m. Inspiración ardiente del poeta o del artista. 
Sinónimo: f. musa 




Hace varias noches atrás tuve insomnio, haciendo que la noche pareciese más corta y el desvelo más largo. Es curioso como puedes tener sueño, pero no puedes dormir porque te pones a pensar.
Ya es rutina, eso de estar pensando en aquel tema concreto.


Las noches siguientes conseguí caer en los brazos de Morfeo, pero mi mente seguía jugando conmigo, lo que provocó que soñara con un estro anónimo que lleva atormentado mis noches varias veces.
Y en algunas ocasiones despierto al filo de la madrugada, con una tristeza que no puedo controlar, quizá por no saber en que piensa aquel estro. Si sus noches son tranquilas o duerme inquieto por algún sueño que ha tenido noches atrás.

Y al final de todo, lo que me asusta es que los insomnios tienen guardado, el nombre y apellido de quien los provoca, pero también me hace ver, pensar e imaginar cosas que en el día no puedo. 

El problema está en que cuanto más intento no pensar en aquello, más está en mi cabeza.


«Estoy sentada en el medio de la cama, en plena madrugada, de nuevo sin poder dormir, y sin poder sacarle de mi mente»








             *  *  * 





“La seducción no está en la belleza física, está en los gestos. Porque no depende de qué ojos tenga, sino de cómo te mira con ellos” – @/BOHEMIO 




viernes, 13 de mayo de 2016

Poesía, mi puerta de escape

Hace un año se abrió ante mi una puerta hacia el arte de la poesía, un lugar extraño donde pude desenterrar todos esos sentimientos que no podía explicar con mi simple vocabulario en el habla.

Llevo leyendo a grandes poetas de la literatura, y uno de los que me inspiran a seguir dentro de este mundo es Francisco Gómez de Quevedo con sus grandes vocablos al escribir. Y si pudiera elegir un poema de entre tantos suyos, escogería Definición del amor, con pequeños versos pero que reflejan con fidelidad el sentimiento que demuestra la palabra "amor", o eso encuentro yo al leer y sentirlo.

La poesía me ha ayudado en mis momentos de abismo, enseñándome que no estoy sola en esas situaciones y que es posible levantarse con palabras que quizá para algunos sean simples palabras pero para mí sean la mano que necesito agarrar con fuerza para no caer en mis demonios.

Leer poesía expone todo sentimiento que ni siquiera supe que tenia. Me hace sacar lo mejor que puedo hacer de mí y me hace sentir que tengo una puerta que me lleva a un camino sin fin, donde mis preocupaciones no existen y nadie me juzga por mi fisionomía sino por mis palabras y mi modo de ver el mundo subjetivo.

Gracias a la poesía y a los grandes autores que forman parte de ella puedo ser la persona que soy, cambiando el pensar negativo que tenia ante esta sociedad, demostrándome que aún existen personas buenas que sin saberlo dan aliento de fuerza con sus escritos y palabras profundas.



Atte. Musa E